Thursday 29 September 2011

tender age in bloom

Después de un tiempo, vuelvo a dedicarle tiempo a una entrada. Quizá sea que mi animo esta bastante primaveral (lo digo por lo cambiante, no por lo colorido y alegre).

Mientras "estudiaba" para un parcial que tengo dentro de unas horas, comenzó a llover de golpe. Entonces, fui a buscar mi cámara de fotos (new baby) y me preparo un banquito para tomar fotos desde la ventana. Montevideo húmeda se siente más linda y cómoda que nunca. Hace calor y dejo la ventana abierta y tomo un par de fotos, las suficientes como para darme cuenta que debería regalarle tiempo a mi cámara para empezar a entenderla. Todavía tengo todas las fotos de New York en la tarjeta (viaje del cual volví hace un par de meses ya y recién me tomé la molestia de cargar a la pc); es evidente que estoy y he estado distraído. 

¿la razón?
Me siento un personaje de Woody Allen en mi relación; egocéntrico, terco y neurótico. Diferente. Anormal. Pero mi voluntad es buena, salvo raras excepciones. Mi mente -bastante bohemia últimamente- divaga entre trabajo, tesis, clases y proyectos sin dejar lugar a la tranquilidad. Para agraviarlo, las discusiones se suceden y aveces ni divagar se puede. ¿tendrá razón Sabina al decir que las mujeres prefieren "mentiras piadosas"? siempre preferí creer lo contrario, aunque ya no lo sé. Algunas verdades duelen y no es lindo lastimar a nadie (Sé que una mentira es peor pero...) bromeando con mis amigos me anime a decir que si bien las mentiras tienen patas cortas, algunas  verdades te cortan las patas.

Miró las fotos que tomé y salvo ésta, el resto quedó fuera de foco. ¿Estaré tan desenfocado yo? Estoy perdiendo pixeles por el camino y me pregunto si no estaré viendo un poco "mal" las cosas o si mi postura es la adecuada (estar fuera de foco puede ser un indicio). Pero no importa, la lluvia me da ganas de escribir así que prefiero abrir el flash y ver las cosas con un poco más de luz. De última es primavera, si el clima cambia de azul a gris, porqué no abríamos de hacerlo nosotros. Es cuestión de aceptar las cosas y actuar en consecuencia.

Como dice Boris Yellnikoff (otro personaje de Allen): That's why I can't say enough times, whatever love you can get and give, whatever happiness you can filch or provide, every temporary measure of grace, whatever works.